La región de Šumava a vista de pájaro

Los miradores de Libín, Javorník, Poledník, Boubín, Márský vrch y Zadov ofrecen hermosas vistas de la región de Šumava.

Vistas desde la montaña más alta del somontano de Šumava

El mirador de Libín ofrece una panorámica maravillosa desde la montaña más alta del somontano de Šumava. Desde lo alto de la torre alcanzarás a ver las ciudades de Prachatice y Písek, la central nuclear de Temelín, el palacio de Hluboká, las montañas Boubín y Javorník, y, si hay buena visibilidad, los Alpes. El mirador está abierto todo el año. Cerca del mirador se puede visitar un parque de cuerdas.

Vistas en medio del bosque primitivo

El mirador de madera de Boubín se encuentra en medio del bosque primitivo del mismo nombre. 109 escalones llevan hasta la plataforma de observación del mirador, que ofrece una panorámica sorprendente. Al oeste y al norte, divisarás las montañas de Šumava, la sierra Sředočeská pahorkatina (Las Tierras Altas de Bohemia Central) y la ciudad de Vimperk. Al este se asoma la torre de vigilancia con el observatorio Kleť. Y al sur se puede observar la montaña Plechý y, con buena visibilidad, incluso los Alpes. El mirador está abierto durante todo el año. El mejor modo de llegar al mirador es desde el pueblo Kubova Huť, desde donde hay un desnivel de 370 metros.

Mirador de Klostermann

El mirador de Javorník (1066 m s.n.m.), que lleva el nombre del escritor nacido en Šumava, Karel Klostermann, tiene una altura de 39,6 metros. Para llegar a su punto más elevado hay que subir 197 escalones. El esfuerzo vale mucho la pena, ya que tendrás una vista panorámica de 360 grados que permite admirar las cumbres de Šumava y, cuando hace buen tiempo, incluso los Alpes. Desde el mirador también se divisan las ciudad de Písek, el castillo de Rabí, la central nuclear Temelín y la sierra de Brdy. El mirador está abierto todos los días, de abril a septiembre, y de octubre a marzo sólo los fines de semana. Permanece cerrado cuando hace mal tiempo.

Šumava desde el trampolín de salto de esquí

El mirador de Zadov es realmente un lugar singular, ya que nació como trampolín de saltos de esquí en 1978. Ha sido reformado recientemente, y ya está abierto al público de nuevo. Uno de los atractivos de este mirador es la pared de escalada ubicada en su lado suroeste. Hasta el mirador es posible subir en el telesilla Zadov – Kobyla, en cuya estación inferior hay un parque infantil, y se puede comprar algo de comida rápida. Desde el pueblo Churáňov también se puede acceder al mirador siguiendo la señal turística azul o por la ruta ciclista 1203 (es un recorrido de 1 km aproximadamente). En la parte alta del mirador encontrarás una cafetería. El mirador está abierto todos los días durante los meses de julio a septiembre, fuera de esta época sólo los fines de semana y festivos.

Šumava en la palma de tu mano

El mirador Poledník, cerca de la localidad de Prášily, proporciona al visitante una hermosa vista de las montañas de Šumava, tanto de la parte checa como alemana. Tiene una altura de 37 metros y es necesario subir 227 escalones para llegar arriba del todo. En el ascenso al mirador es posible parar en tres plataformas de observación, donde se muestran galerías de fotos de la naturaleza de Šumava. La panorámica de los picos de Šumava, desde este mirador, uno de los más altos de la República Checa, es una experiencia inolvidable.